Al menos 8.000 nuevos documentos sobre el caso de tráfico sexual de menores que involucra a Jeffrey Epstein quedaron disponibles este martes en la página web del Departamento de Justicia de Estados Unidos.
La publicación se produce tras el vencimiento del plazo legal establecido por el Congreso, lo que desató una tormenta política en Washington.
Entre el material revelado se encuentran cientos de videos y audios, incluyendo piezas clave como las imágenes de vigilancia de agosto de 2019, fecha en la que el criminal sexual fue encontrado muerto en su celda.
El Departamento publicó cerca de 11.000 enlaces, aunque el análisis inicial indica que muchos de ellos no conducen a ningún archivo, lo que avivó las sospechas.
Amenazas de juicio político y críticas bipartidistas
La difusión de los archivos llega tarde y, según los legisladores, incompleta. El Congreso había aprobado casi por unanimidad la Ley de Transparencia de los Archivos de Epstein (EFTA), que obligaba a la publicación total de la información antes del viernes pasado.
Ante el incumplimiento, los coauspiciadores de la ley, el demócrata Ro Khanna y el republicano Thomas Massie, amenazaron con presentar cargos por desacato contra la fiscal general, Pam Bondi.
"El Departamento de Justicia debe dejar de proteger a los hombres ricos y poderosos que no fueron acusados", denunció Khanna, exigiendo la liberación de expedientes específicos que aún permanecen bajo secreto. En sintonía, un grupo de víctimas del exfinanciero criticó que solo se haya hecho pública una "fracción" de los archivos y calificó de "anómalo y extremo" el nivel de tachaduras y censura en los documentos entregados.
La sombra del "encubrimiento" y el factor Trump
La tensión escaló al punto de que el líder de la minoría en el Senado, el demócrata Chuck Schumer, presentó una resolución para emprender acciones legales contra la administración. "Es claramente una operación de encubrimiento", afirmó.
Durante la campaña 2024, Donald Trump apoyó la publicación de los archivos. Posteriormente, calificó el reclamo como una "farsa" instrumentalizada por los demócratas. Finalmente, en noviembre, cedió a la presión del Congreso y promulgó la ley de transparencia.
Desde el Departamento de Justicia, el fiscal general adjunto, Todd Blanche, justificó el retraso y las censuras alegando la necesidad de proteger la identidad de más de 1.000 víctimas de Epstein.
Asimismo, negó categóricamente que se esté protegiendo a Trump, quien fuera amigo íntimo del magnate en el pasado.